La consultora y corredora de seguros Aon reveló, en su informe sobre cambio climático, que 2023 fue el año con mayor cantidad de catástrofes naturales que ocasionaron pérdidas multimillonarias en la historia.

Los destrozos ocasionados por los desastres naturales ascendieron a 380 mil millones de dólares, lo que representó 22 % más que la media de lo registrado en el siglo XXI, adicionado al número de personas fallecidas, que llegó a 95 mil.

El informe indica que 398 desastres naturales ocurrieron en todo el mundo, principalmente debido a terremotos y tormentas convectivas severas en Estados Unidos y Europa.

A pesar de ello, las pérdidas aseguradas superaron en 31 % el promedio del siglo actual, alcanzando más de 100 mil millones de dólares por cuarto año consecutivo.

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Dado que las compañías de seguros sólo cubrieron 118 mil millones de dólares, es decir, el 31 % de las pérdidas totales, la “brecha de protección” se situó en el 69 %, lo que representa un aumento de once puntos con respecto a 2022.

Con 66 desastres que generaron pérdidas económicas valuadas en mil millones de dólares cada uno, y 37 desastres que generaron pérdidas aseguradas por otros mil millones de dólares.

En este contexto, los terremotos fueron responsables de la mayor parte de las pérdidas económicas, mientras que las tormentas convectivas severas resultaron ser las más costosas para las aseguradoras.

Nueva Zelanda, Italia, Grecia, Eslovenia y Croacia experimentaron los desastres meteorológicos más costosos de su historia.