La candidata presidencial de la coalición Sigamos Haciendo Historia, Claudia Sheinbaum, aseguró que a la derecha mexicana y de otros lugares del mundo les preocupa la fortaleza de su movimiento, pero que en México existen reglas electorales que deben respetarse.

En respuesta al apoyo ofrecido por el partido ultraderechista español Vox a Xóchitl Gálvez, abanderada de la oposición, Sheinbaum afirmó que la preferencia por la transformación está más fuerte que nunca y que ganará el debate del 7 de abril.

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Durante una conferencia de prensa, la candidata destacó que la campaña de odio de la derecha no está funcionando y que su propuesta se basa en honestidad, resultados y amor al pueblo.

Además, Sheinbaum aprovechó su visita a Saltillo, Coahuila, para reunirse con trabajadores de Altos Hornos de México (AHMSA), uno de los símbolos de corrupción del neoliberalismo, para conocer sus necesidades y comprometerse a apoyarlos.

En un mensaje en redes sociales, Sheinbaum señaló que AHMSA fue privatizada durante el periodo neoliberal y que los trabajadores han padecido la corrupción y el mal manejo que llevaron al cierre de la empresa.