Hace unos días el Atlético Morelia decidió rescindir el contrato del futbolista Brian Fernández, luego de que recayera en su problema de adicciones, lo que causó revuelo a nivel nacional.
Sin embargo, su caso no es el único en el futbol mexicano, ya que existen jugadores que atravesaron problemáticas similares, algunos superándolas y otros más quedándose en el camino.
En Evangelio te presentamos un recuento de los profesionales del futbol que sus carreras se vieron opacadas por los vicios:
Ignacio Ambriz
Uno de los defensas más importantes en la historia del balompié azteca, incluso con constante participación en la Selección Mexicana; sin embargo, tuvo episodios oscuros en su carrera cuando se hizo adicto a la droga y al alcohol.
El ahora entrenador, que ya fue campeón de liga, en su momento relató que fue en la década de los años 80 cuando probó la droga, con la que se enganchó por un periodo de tres años.
Tras superar la etapa con fuerza de voluntad, en los 90 se enfrentó a otro demonio personal: el alcoholismo. No obstante, para darle la vuelta al problema, reconoce que fue fundamental el apoyo que recibió del entrenador Manolo Lapuente.
Pablo Larios
Para muchos, es el mejor portero que tuvo México, y si bien en la cancha siempre brilló, fuera de ella lidió una dura batalla con la cocaína, la cual terminó desfigurándole el rostro a causa de un virus que contrajo.
Pese a múltiples cirugías, el arquero de equipos como Puebla y Toros Neza, nunca recuperó su rostro, por lo que los últimos años de su vida los dedicó a orientar a los jóvenes para que no cometieran el mismo error que él.
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Carlos Reinoso
Está dentro del exclusivo listado de leyendas del América, pero Carlos Reinoso también vivió su propio infierno cuando se hizo adicto a la cocaína. “Me metía hasta 20 pases diarios”, confesó en alguna entrevista.
El futbolista chileno compartió que por varios años estuvo inmerso en el mundo de las drogas, siendo la clínica de rehabilitación, su familia y la fe religiosa las que lo llevaron a recuperarse y mantenerse limpio hasta el día de hoy.
Luis Alonso “Negro” Sandoval
Este mediocampista caracolero fue considerado en su momento como una de las grandes promesas del futbol mexicano, pero el problema radicaba en que también amaba las fiestas y la vida nocturna.
Aunque llegó a vestir camisetas como las de Chivas y América, el “Negro” poco a poco fue bajando su nivel y cada vez se le reconocía más por lo que hacía en los antros y ya no por su funcionamiento en la cancha.
Pese a que concluyó su carrera en un club profesional, los escándalos no cesaron, pues hace dos años lo detuvieron en Estados Unidos por posesión de cocaína.
Giovani dos Santos
Los primeros años profesionales del hijo de Cecilio de los Santos estuvieron llenos de gloria: campeón con México en el Mundial Sub-17, jugador del Barcelona a lado de Ronaldinho y una constante en las convocatorias de la selección.
Sin embargo, el delantero fue ganándose el mote de Giovani “DeFiestas” por su constante abuso a la diversión, a tal grado que de jugar en clubes de Europa pasó a no tener equipo en la actualidad.
Buenas sensaciones.! ⚡️⚽️ pic.twitter.com/3soVSesy1r
— Giovani Dos Santos (@OficialGio) July 18, 2019
Carlos “Gullit” Peña
Uno de los casos más emblemáticos en los últimos años es el de Carlos “Gullit” Peña. Por sus actuaciones con el León, que derivaron en un bicampeonato, fue tomado en cuenta en la selección nacional y representó al país en el Mundial de Brasil 2014.
Gracias a su talento, consiguió jugar en Europa con los Rangers de Escocia, pero los excesos aparecieron en su vida y su nivel vino a la baja. Tras fracasar en el viejo continente, volvió a casa, pero ni en Chivas, Cruz Azul y Necaxa, pudo retomar el camino.
Más que por su actividad deportiva, al “Gullit” Peña se le empezó a conocer más por sus polémicas en centros nocturnos y a través de videos virales en el que se le observa en estado de ebriedad.