La comida en un avión es fundamental en la experiencia de viaje, pero a veces puede tener graves consecuencias, como en el caso de un vuelo de Delta Air Lines que tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en Nueva York debido a la presencia de moho negro en los alimentos servidos.

El vuelo 136 con destino a Ámsterdam aterrizó de emergencia en el aeropuerto JFK después de que al menos 24 pasajeros se enfermaran por consumir alimentos contaminados. Los afectados presentaron síntomas como fuertes dolores abdominales, diarrea y vómitos.

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A pesar de que inicialmente se informó que 70 personas estaban enfermas, solo 24 requirieron atención médica de urgencia y por suerte no necesitaron ser hospitalizadas, siendo diagnosticados con una infección intestinal.

Aunque no se ha revelado específicamente qué comida estaba contaminada, Delta Air Lines confirmó que una parte del servicio de comidas en la Cabina Principal estaba en mal estado.

Tras el incidente, los 277 pasajeros del vuelo fueron alojados en un hotel para pasar la noche y continuarán su viaje en el día siguiente.

La aerolínea emitió disculpas por el suceso y aseguró que investigará a fondo lo sucedido para evitar incidentes similares en el futuro.