Los asesinatos en Costa Rica podrían llegar a una cifra récord en 2023, así lo dio a conocer el Mario Zamora, ministro de Seguridad de aquel país, adjudicando la responsabilidad a la influencia de los grupos del crimen organizado mexicanos y al aumento de la producción de cocaína en Colombia.
De acuerdo con datos oficiales, durante el primer semestre de 2023, la suma de homicidios supera en 42 % al recuento del pasado año durante el mismo lapso, aún cuando 2022 cerró con la cifra récord de 656 asesinatos.
En un país que anteriormente era considerado como un lugar seguro entre naciones conflictivas, hoy se comete un homicidio cada diez horas, y los motivos apuntan a las disputas entre asociaciones delictivas antagónicas por rutas y plazas.
De acuerdo con el ministro, el Cártel de Sinaloa ha ocupado a Costa Rica como un territorio estratégico de logística, donde opera en la recepción de cocaína proveniente de Colombia para distribuir dicha mercancía hacia Estados Unidos y Europa. Los datos oficiales reportaron que este año ingresaron al continente europeo diez toneladas de cocaína provenientes de Costa Rica
Mario Zamora aseguró que su país vive una “mexicanización” de la delincuencia, ya que actualmente se reconocen casos de tortura, ejecuciones por sicarios entrenados y otras prácticas propias del crimen organizado mexicano; por tal motivo, ha crecido la preocupación de las autoridades del país centroamericano que vive, en gran medida, del turismo.