El presidente Andrés Manuel López Obrador exhortó a los opositores a su gobierno a no continuar con la campaña que pretende culparlo de cualquier ataque contra la aspirante presidencial Xóchitl Gálvez, considerándola “muy irresponsable, perversa, de malas entrañas y riesgosísima”.
En conferencia de prensa matutina, el mandatario dijo que algunos de sus adversarios políticos “están fuera de sí”, por considerar que puede ordenar que se le haga daño a un opositor.
“Están difundiendo que si le pasa algo a un periodista y a un aspirante a la Presidencia, va a ser culpa mía”, aseveró.
López Obrador sostiene que ese mensaje está siendo difundido por los periodistas Joaquín López Dóriga, Héctor Aguilar Camín, Beatriz Pagés y Raymundo Riva Palacio, a quienes vinculó al expresidente priista Carlos Salinas de Gortari.
López Dóriga, precisó, llegó a decir que si le pasaba algo a Gálvez, “iba a ser como el asesinato de [Luis Donaldo] Colosio, que le echaron la culpa a Salinas”.
“[Decirles que] nosotros no actuamos de manera perversa, que somos partidarios, seguidores, de la doctrina del amor al prójimo; que desde que estoy en la Presidencia no he ordenado reprimir a nadie”, sostuvo.
El mandatario reiteró que su gobierno busca llevar a cabo una transformación en el país “de manera pacífica y democrática”, y que está acostumbrado a “luchar por esa vía y enfrentar a los adversarios en buena lid, no con el uso de la fuerza, no con trampas, no de manera inmoral”.
López Obrador dijo que no llegó a la Presidencia de México “dejando trozos de dignidad” y aludió a su dignidad moral para exhortar a los promotores de esa campaña a reflexionar al respecto y detenerse, aludiendo a que hay “mucha maldad” y fascismo en tal maniobra.
“No necesitamos reprimir a nadie… ni lo hemos nunca por convicción ni políticamente necesitamos reprimir a ninguna persona, ¡a nadie!”, dijo y respaldó su comentario en el apoyo político de la mayoría de los mexicanos.
“Ojalá recapaciten (…) es mucho muy irresponsable, porque es apostar a desestabilizar, es no importar los medios para lograr un propósito… es muy perverso”, opinó.