El presidente Andrés Manuel López Obrador propuso que los candidatos presidenciales en Estados Unidos, Donald Trump y Joe Biden, firmen un compromiso para regular la venta de armas en ese país para reducir la violencia.

En conferencia de prensa matutina, el mandatario fue cuestionado en torno a cómo los jóvenes estadounidenses menores de 21 años no pueden entrar a un bar, pero sí pueden comprar un arma.

“Ayudaría mucho el que se controle la venta de armas en Estados Unidos, urge hacerlo”, dijo.

Thomas Matthew Crooks, el presunto agresor de Trump, tenía 20 años de edad, cuando intentó asesinar a Trump durante un mitin en Pensilvania, usando un rifle estilo AR-15 que adquirió legalmente.

El joven se hallaba a más de 100 metros del evento y disparó desde una azotea. Cuando apretó el gatillo, los francotiradores de Trump hicieron lo propio causándole la muerte inmediata. La oreja de Trump resultó herida.

“Yo creo que sería un acto bien visto por los estadounidenses el que firmaran los dos candidatos un compromiso de regular la venta de armas en Estados Unidos”, dijo esta mañana López Obrador.

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Aseguró que en lo que va de su gobierno, han sido decomisadas alrededor de 50 mil armas, siendo las más peligrosas las AR-50. “Ayer decomisamos de esas”, recalcó.

“El 75 % aproximadamente [de las armadas decomisadas] entran de contrabando desde Estados Unidos, y un porcentaje considerable de Texas… Pero no hay ningún control”, sostuvo.

López Obrador ha sido un crítico sobre el nulo control de armas en Estados Unidos; de hecho, su gobierno impusló una demanda contra las armerías de Estados Unidos, causantes de dotar de equipo al crimen organizado.

“Si nosotros decomisamos 50 mil, imagínense cuántas entran”, cuestionó.

Señaló que ver a Trump y a Biden firmando un compromiso “sería un acto de buena fe en busca de la unidad y de la paz”. Al menos, destacó, “un primer paso” para ese fin.

Sin embargo, reconoció que en Estados Unidos se tienen que atender otras causas que originan la violencia, porque “esto es una crisis social (…) hay una descomposición social y eso no se arregla sólo con medidas coercitivas”.