Luego de que la dirigencia nacional del PRI decidiera apoyar a la panista Xóchitl Gálvez para que encabece una candidatura única en el Frente Amplio por México, sometiendo así a la priista Beatriz Paredes, la elección del domingo con ese fin quedó en vilo.

La decisión del líder priista Alejandro Moreno de declinar a favor de la aspirante del PAN, se da días después de que hiciera lo mismo el dirigente del PRD, Jesús Zambrano.

De hecho, Xóchitl Gálvez comentó como un logro que por primera vez en su historia, el PRI tendrá un candidato presidencial de otro partido.

Alejandro Moreno informó que la decisión del partido se basaba en que a su aspirante Beatriz Paredes no la favorecían los resultados de las encuestas, perdiendo 42.42 % contra 57.58 %.

Cuando dio ese mensaje, el priista no se hizo acompañar de Paredes, quien había mostrado un rechazo a los dichos de su dirigente, los cuales fueron interpretados como otro llamado a declinar a favor de la panista, algo que no ha hecho.

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Incluso, el priista atiborró de elogios a la panista: “es líder, elocuente, congruente, sagaz y muy combativa”.

Horas antes, el frente opositor difundió los resultados de la encuesta para medir la preferencia hacia ambas senadoras, los cuales dieron 15 puntos de ventaja a Gálvez sobre Paredes.

Gálvez había manifestado que quiere culminar el proceso con la elección del domingo, aun cuando las encuestas actuales la favorecieron, ya que vería como un mensaje erróneo que la priista declinara a su favor.

Paredes había tomado la misma postura de terminar el proceso, pero el miércoles reconoció que “los resultados [de las encuestas] no me favorecen”, y que terminaba su “biografía política” buscando nuevamente una candidatura presidencial.

Sin embargo, el comité organizador del Frente Amplio por México no ha informado sobre si habrá elección el domingo.