La empresa Triton Subs confirmó que ya construye el nuevo submarino que bajará hasta los restos del Titanic, a solo un año de que el sumergible Titán implosionó cuando buscaba realizar la misma labor, dejando un total de cinco personas desaparecidas que fueron dadas por muertas.

De acuerdo con información de la empresa, el submarino TRITÓN 4000/2 Abyssal Explorer será una nave de alto rendimiento que tiene diseños específicamente enfocados en las exploraciones profesionales.

El sumergible tiene un casco acrílico certificado comercialmente para inmersiones a más de 13 mil pies. Es, además, un casco transparente que permite ver hacia afuera y adentro con total libertad, regalando una óptica que ningún otro sumergible integra.

El TRITÓN cuenta con un diseño que le permite bucear muy profundo; además, está equipado con un “ala de gaviota” que se pueden desplegar. Con las alas desplegadas puede desplazarse hacia puntos de interés rápidamente o mantener un rumbo fijo por varias horas.

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También le permite al submarino ascender y descender con mayor velocidad o propulsión.

Está construido para maniobrar en espacios reducidos, y cuenta con iluminación y cámaras adecuadas para la observación y para filmar o tomar fotografías. Las cámaras se ubican en las puntas de las alas para un punto de vista externo.

En el TRITÓN pueden viajar únicamente un piloto y un acompañante. Tiene una velocidad de tres nudos, y una resistencia en el agua de 12 horas.

Sus medidas son de 4.45 metros de longitud por 2.75 metros de ancho; así como seis metros de alas hacia afuera, una altura de 3 metros y un peso de 12 mil kilogramos.

La presión interior del casco es de 59.1 pulgadas y un volumen del casco de presión de mil 770 litros.