Ataques lanzados por Israel la madrugada del martes 9 de septiembre contra un campo de refugiados al oeste de Jan Yunis dejó decenas de muertos y heridos, entre ellos un gran número de niños y mujeres, informó la agencia de noticias Wafa.

Según el servicio de emergencias civiles de Gaza, al menos 20 tiendas de campaña se incendiaron en el lugar, donde los misiles abrieron cráteres de hasta nueve metros de profundidad, recoge Reuters.

Además, se informa de un total provisional de 65 víctimas, sin proporcionar un desglose de muertos y heridos.

“Nuestros equipos siguen sacando mártires y heridos de la zona atacada. Parece una nueva masacre israelí”, declaró un funcionario de emergencias civiles de Gaza.

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Por su parte, el Ejército israelí aseguró que el bombardeo tuvo como objetivo un centro de mando de Hamás en la zona.

Desde Telaviv han declarado que sus fuerzas armadas golpearon “a importantes terroristas de Hamás que operaban dentro de un centro de mando y control incrustado dentro del Área Humanitaria en Jan Yunis”.

“Los terroristas avanzaron y llevaron a cabo ataques contra las tropas de las Fuerzas de Defensa de Israel y el Estado de Israel”, según el de las Fuerzas de Defensa de Israel.