El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla presentó su cuarto informe de labores con un mensaje orientado a destacar avances en infraestructura, medio ambiente y administración pública, asegurando que Michoacán vive una etapa de “transformación sin deuda”.
El mandatario afirmó que durante su gestión se han invertido más de 40 mil millones de pesos en obra pública sin recurrir a préstamos, lo que contrastó con la administración de Silvano Aureoles, a quien reprochó la contratación de un crédito de 4 mil millones de pesos cuyo destino sigue sin aclararse.
Ante la presencia de Lázaro Cárdenas Batel, en representación de la presidenta Claudia Sheinbaum, así como alcaldes, legisladores y funcionarios estatales y federales, Ramírez Bedolla sostuvo que su administración sigue los principios de la llamada Cuarta Transformación. Reconoció además a la titular de Obras Públicas, Gladys Buranda Macías, como pieza clave en la ejecución de proyectos estratégicos para el estado.
En materia ambiental, resaltó los trabajos de rescate de manantiales en la zona lacustre de Pátzcuaro y el sistema Guardián Forestal, que permite vigilar en tiempo real millones de hectáreas de bosques michoacanos para frenar el cambio ilegal de uso de suelo. De acuerdo con el gobernador, esta tecnología ya ha derivado en la presentación de cerca de mil denuncias.
En lo económico, mencionó la construcción del mercado municipal de Pátzcuaro, espacio donde actualmente se sostienen más de 3 mil familias, además de la rehabilitación de plazas y sitios históricos como la Gertrudis Bocanegra.
El rubro administrativo también ocupó parte de su discurso. Ramírez Bedolla subrayó la digitalización de trámites fiscales y de servicios, lo que, dijo, contribuye a reducir la corrupción. La Secretaría de Finanzas, añadió, cuenta con un reconocimiento internacional en materia de prácticas anticorrupción.
Finalmente, en educación, aseguró que su gobierno ha estabilizado al sistema magisterial, garantizando que los docentes reciban sus salarios completos y puntuales, una problemática que arrastraba el estado desde hace años.
Con este balance, Ramírez Bedolla presentó a Michoacán como un estado que combina disciplina financiera con obras públicas, cuidado ambiental y atención a los sectores más sensibles de la población.