Blanca Ibarra Ochoa asumió este miércoles el cargo de presidenta municipal de Cotija, municipio que en los últimos meses ha sido blanco de la violencia del crimen organizado.

Ibarra rindió protesta en el Congreso de Michoacán como alcaldesa sustituta, luego de que Juan Pablo Aguilar abandonara su puesto por, dijo la nueva funcionaria, “motivos personales”.

Ante los diputados locales, la nueva alcaldesa desmintió las versiones que indicaban que su antecesor había dejado el municipio debido a amenazas del crimen organizado.

“Definitivamente no tenemos miedo”, afirmó Ibarra Ochoa en su intervención, subrayando que las versiones sobre amenazas a Aguilar eran falsas.

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Ibarra puntualizó que el exalcalde panista se separó del cargo con el debido permiso del Cabildo, aclarando que su salida no obedeció a presiones externas ni a intimidaciones de grupos criminales como se manejó, dijo, en medios de comunicación.

Además, en ese contexto, rechazó la posibilidad de solicitar protección personal al Gobierno de Michoacán, algo que se había especulado, ante la situación de violencia que vive el municipio.

El pasado 3 de junio, la entonces alcaldesa Yolanda Sánchez Figueroa, del PAN, fue asesinada junto con su escolta en el centro de la ciudad.

El crimen se produjo en un contexto de creciente violencia en la región; la funcionaria había sido previamente amenazada por el crimen organizado.