En Maruata, Michoacán, se viven momentos de tensión tras los enfrentamientos ocurridos la tarde del martes entre guardias comunitarios de Aquila y presuntos delincuentes armados.

El enfrentamiento, que dejó como saldo al menos tres comunitarios fallecidos, tuvo lugar a escasos metros del hospital local, lo que provocó el abandono del nosocomio por parte del personal de salud, temeroso de que se registraran nuevos tiroteos.

Ante esta situación, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Michoacán informó sobre el despliegue de un amplio operativo de seguridad en la región, contando con la participación de elementos de la Guardia Civil y la Guardia Nacional.

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Este refuerzo pretende garantizar la tranquilidad de los habitantes y permitir el regreso del personal médico al hospital de Maruata, cuya ausencia representa un riesgo significativo para la población.

El hospital más cercano está a más de dos horas de distancia, lo que complica la atención médica oportuna en caso de emergencias, especialmente en situaciones de violencia como la reciente.

Aquila, uno de los puntos más alejados de los centros urbanos de Michoacán, enfrenta serias dificultades en materia de acceso a servicios básicos, incluido el de salud.