El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció que su gobierno responderá de manera inmediata y decidida si Estados Unidos procede con la amenaza de imponer un arancel del 25 % a las importaciones canadienses.

La medida, impulsada por el presidente Donald Trump, busca presionar a Canadá y México para que tomen acciones más enérgicas contra la inmigración ilegal y la llegada del fentanilo a territorio estadounidense.

Ante un consejo asesor sobre las relaciones bilateral, Trudeau subrayó que Canadá se enfrenta a un momento crítico, advirtiendo a los canadienses sobre la posibilidad de tiempos difíciles.

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“Estamos preparados con una respuesta: una respuesta decidida, contundente pero razonable e inmediata. No es lo que queremos, pero si avanza, también actuaremos”, afirmó.

Canadá depende en gran medida de su relación comercial con Estados Unidos, enviando el 75 % de sus exportaciones de bienes y servicios a su vecino del sur.

Ante la potencial crisis económica, Trudeau tranquilizó a la población, asegurando que “el Gobierno federal y todas las órdenes de Gobierno les cubren las espaldas” en estos tiempos inciertos.