El expresidente de México, Enrique Peña Nieto, mandó espiar a los empresarios Carlos Slim y Germán Larrea, además de decenas de periodistas, con el software Pegasus.

De acuerdo con Zeus, un testigo protegido del primer juicio que se lleva a cabo en México por el presunto uso ilegal del programa, que es propiedad de la empresa israelí NSO Group y que solo se vende a gobiernos.

En el proceso, el único acusado es Juan Carlos García Rivera, a quien se le señala como operador de Pegasus para el corporativo KBH, que en realidad era una red de empresas fantasmas que le vendió software al pasado Gobierno de México.

El testigo aseguró que el dueño de la empresa KBH, Uri Ansbacher Bendrama, fue instruido directamente por Peña Nieto para espiar a los “objetivos”. El apodo del exmandatario, de acuerdo a la declaración citada, era “El Patrón”.

Te puede interesar: Padres de los 43 piden investigación penal contra Peña y Harfuch

Algunos de los nombres mencionados en el juicio ya se habían difundido, pero la sorpresa fue el de Slim, el empresario más acaudalado de América Latina que durante años disputó con Bill Gates el título del más rico del mundo.

El otro es Larrea, director del Grupo México, la empresa minera más grande del país.

Señaló que los nombres de esas personas están incluidas en una lista, elaborada en Excel y que fueron enviados al Cisen. En la lista, recordó, también están los periodistas Héctor de Mauleón y Pedro Ferriz de Con.

“A mí me tocó ser testigo varias veces de llamadas que (Uri Emmanuel Ansbacher) recibía… directamente del presidente, a quien Uri le decía Patrón”, explicó el testigo y dijo que también había llamadas que hacía Miguel Osorio Chong, a quien Uri le decía Jefe, para dar indicaciones sobre el espionaje.

La información relacionada con el espionaje incluía fotografías, videos, registros de llamadas (entrantes y salientes) y mensajes, eran enviados a un correo electrónico de Gmail registrado a nombre de “Eugenio”, explicó el testigo.