En una conversación telefónica, el ministro de Comercio de China, Wang Wentao, manifestó “serias preocupaciones” a su homóloga estadounidense, Gina Raimondo, respecto a las recientes restricciones impuestas al comercio bilateral.

Wang pidió a la administración de Joe Biden a levantar las sanciones a empresas chinas “tan pronto como sea posible”, según un comunicado emitido por el Ministerio de Comercio de China.

Durante la llamada, Wang subrayó la importancia de aclarar los límites de seguridad nacional en los ámbitos económico y comercial, haciendo hincapié en las implicaciones de la política estadounidense hacia China en sectores clave como los semiconductores y los automóviles conectados a la red.

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La comunicación se produce en un contexto de tensiones comerciales entre las dos naciones, semanas después de que entraran en vigor incrementos de aranceles estadounidense sobre productos clave, que incluyen vehículos eléctricos, baterías para vehículos eléctricos y paneles solares, sumando un impacto de 18 mil millones de dólares en productos chinos.

Las medidas adoptadas por Washington parecen estar motivadas, en parte, por la proximidad de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.

Además, se ha informado que el gobierno estadounidense planea prohibir el ingreso de vehículos conectados que utilicen tecnología china y rusa, argumentando riesgos para la seguridad nacional.

Paralelamente, también se han restringido las exportaciones de tecnología a China, abarcando semiconductores y maquinaria vinculada a su producción.