La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) lanzó una advertencia sobre el colorante rojo 3, también conocido como eritrosina, luego de detectar que su uso en productos como galletas, gelatinas y polvos saborizantes excede los límites considerados seguros para el consumo humano. El organismo alertó que la exposición prolongada a este aditivo podría representar un “riesgo no aceptable” para la salud pública.
Tras una revisión de mercado, la autoridad sanitaria concluyó que algunos productos ampliamente distribuidos en el país, como ciertas galletas comerciales y gelatinas en polvo sabor fresa, contienen concentraciones elevadas del pigmento. La Cofepris advirtió que estas formulaciones superan la ingesta diaria admisible y que, de mantenerse en el mercado sin ajustes, podrían incrementar el riesgo sanitario para consumidores recurrentes.
Ante los hallazgos, la dependencia propuso prohibir el uso de la eritrosina en alimentos procesados y establecer un plazo de 24 meses para que las empresas reformulen sus productos. De manera paralela, el Consejo Científico de Cofepris evaluará la posibilidad de aplicar una medida precautoria inmediata que suspenda temporalmente la utilización del colorante, mientras se actualiza la normativa vigente. En su comunicado oficial, la institución recordó que este pigmento, registrado internacionalmente como FD&C Rojo No. 3, también se encuentra en bebidas y medicamentos, lo que amplía el rango de exposición de la población.
El colorante rojo 3 es un pigmento sintético utilizado para dar tonos brillantes y atractivos a productos de repostería, confitería y postres industriales. Aunque su uso está autorizado bajo ciertas dosis, diversos estudios científicos han puesto en duda su inocuidad. Experimentos realizados en animales revelaron posibles efectos cancerígenos asociados a dosis elevadas de eritrosina, especialmente en ratas macho de laboratorio. Aunque no existe evidencia concluyente de un impacto similar en humanos, los resultados han llevado a múltiples agencias sanitarias internacionales a reconsiderar su autorización.
En Estados Unidos, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) determinó eliminar gradualmente el uso del colorante en alimentos y bebidas, otorgando a los fabricantes un plazo de tres años, hasta 2027, para sustituirlo por opciones más seguras o naturales. La medida se suma a una tendencia global hacia la eliminación de aditivos artificiales vinculados con posibles daños a la salud, especialmente en productos dirigidos a niños.
En México, la advertencia de Cofepris podría marcar el inicio de una transición importante dentro de la industria alimentaria, históricamente dependiente de colorantes sintéticos para mantener la apariencia de sus productos. La autoridad sanitaria subrayó que la protección del consumidor está por encima de los intereses comerciales y que la decisión responde a evidencia técnica y científica actualizada.
La dependencia invitó a la población a mantenerse atenta a los comunicados oficiales y, mientras la regulación entra en vigor, a revisar cuidadosamente las etiquetas de los alimentos para identificar la presencia de “Rojo 3”, “E-127” o “eritrosina” entre los ingredientes. La advertencia no implica una prohibición inmediata, pero sí una señal de alerta sobre la necesidad de vigilar con mayor rigor lo que llega a la mesa de millones de hogares mexicanos.