Después de varias horas de negociación, comuneros de Arantepacua decidieron retirar el bloqueo que mantenían en el libramiento de Morelia, a la altura de Casa Michoacán.

Durante una reunión de casi seis horas con funcionarios de la Secretaría de Gobierno, se pactó dar seguimiento transparente a la ejecución de obras públicas en su comunidad.

Los representantes comunales anunciaron que tendrán acceso directo a los contratos y reportes de avance de las empresas encargadas de los proyectos.

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Entre los compromisos asumidos está la conclusión, antes de que termine el año, del hospital regional, la unidad deportiva y la escuela, obras que forman parte del acuerdo de reparación del daño tras la incursión policial ocurrida en 2017, durante la administración de Silvano Aureoles, que dejó como saldo cuatro personas muertas.

Aunque el diálogo fue liderado por la titular de la Secretaría de Gobierno, el acuerdo fue firmado por el propio gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, quien también aseguró que la reparación integral del daño será completada este mismo año, a pesar de que los hechos sucedieron bajo otra administración.

Uno de los pendientes sigue siendo la disculpa pública, una de las recomendaciones emitidas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), misma que lleva más de cuatro años sin cumplirse.