Ante la presión del gobierno de Estados Unidos para la introducción de maíz transgénico, las comunidades indígenas de Michoacán, por conducto del Consejo Supremo Indígena, alzaron la voz y aseguraron que cerrarán filas en defensa del maíz mexicano.
El órgano de comunidades originarias adelantó que presentarán recursos legales ante cortes internacionales para frenar las variedades de maíz transgénico que ponen en riesgo la tradición del maíz de los pueblos originarios.
Asimismo, destacaron que buscarán otras organizaciones indígenas de Puebla para frenar el intento del gobierno norteamericano de “apropiarse” del “oro mesoamericano”.
La representación del Consejo Supremo se manifestó en torno a su tradición: “Se acordó mantenernos en la defensa y protección de los maíces nativos, los cuales son representativos de nuestra cultura e historia, son patrimonio cultural tangible e intangible de los pueblos indígenas”.
Además, apelaron a la calidad y nutrición: “Sabemos que los maíces transgénicos atentan en contra de la seguridad alimentaria de los pueblos originarios, ocasionan daños a la salud humana y medioambiental, por lo que ante la amenaza de la industria alimentaria, que insiste en contaminar con transgénicos en perjuicio de la salud y bienestar de las personas, nos declaramos listos para movilizarnos de manera autónoma en defensa de los maíces ancestrales”.
Esta semana, el gobierno de Estados Unidos decidió establecer un panel de resolución de controversias bajo el T-MEC para dirimir las diferencias que tiene con México respecto a la prohibición de la importación de maíz genéticamente modificado o transgénico.
Mientras que el gobierno de Canadá aún está analizando los pasos a seguir en el tema, el gobierno de México apeló a que la información derivada de los paneles de expertos permitirán frenar la presión de introducir semillas modificadas genéticamente.