El proyecto “¡Jalo! Por la música” y los conciertos masivos han dejado una derrama económica superior a los 73 mil millones de pesos en los últimos ocho meses en Michoacán.

El sector hotelero, de alimentos, bebidas y de transporte público son los más beneficiados por la política de espectáculos que arrancó en mayo pasado.

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Desde el concierto de Julión Álvarez hasta el concierto del Tri, Molotov, Caifanes, el Gran Silencio y Panteón Rococó, reactivaron la rama económica, turística y de servicios, principalmente en las zonas aledañas a Morelia.

Por lo anterior, tras anunciar la edición, ¡Jalo! Por la lectura, el gobierno del estado anunció que se destinarán 15 mil boletos al sector turístico para atraer derrama económica desde otros estados.

Operadores turísticos, hoteleros y restauranteros recibirán boletos para ponerlos a disposición de paquetes de consumo y, con ello, atraer casi un 30% más de afluencia nacional al concierto de los Fabulosos Cádillacs.