En Michoacán, más de un centenar de madres trabajadoras cuentan con espacios dignos para alimentar y cuidar a sus hijos sin renunciar a su empleo. Actualmente existen 18 salas de lactancia instaladas en distintas dependencias del gobierno estatal, como parte de una política que busca hacer compatibles la maternidad y el desarrollo profesional.
La Secretaría de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres (Seimujer) impulsa esta estrategia bajo la premisa de que conciliar el trabajo y la maternidad es un derecho, no un privilegio. Estos espacios se ubican en dependencias como Salud, Seguridad Pública, Finanzas, Desarrollo Económico, Bienestar, Agricultura y el Sistema DIF, además de oficinas municipales en Pátzcuaro, Morelia, Zitácuaro y Churumuco.
Las salas también funcionan en lugares menos convencionales, como los centros penitenciarios femeniles y el mercado municipal de Pátzcuaro, donde las mujeres trabajadoras o en reclusión pueden ejercer la lactancia de forma segura y en condiciones de respeto.
De acuerdo con la titular de Seimujer, Alejandra Anguiano González, cada sala representa “un paso hacia entornos más humanos y equitativos, donde las mujeres puedan ejercer plenamente sus derechos sin ser castigadas por la maternidad”.
La funcionaria subrayó que la igualdad laboral y la corresponsabilidad en los cuidados son pilares para prevenir la violencia y construir una cultura de respeto entre hombres y mujeres. “Las mujeres no tienen que elegir entre ser madres o desarrollarse profesionalmente. Estamos transformando esa realidad con políticas que ponen la vida y el cuidado en el centro”, afirmó.
Con esta iniciativa, Michoacán busca consolidar una red de espacios seguros que garanticen los derechos de las mujeres trabajadoras y promuevan la igualdad sustantiva en todos los ámbitos.