La crisis por el desabasto de agua en la tenencia de Santa María ha escalado a un conflicto administrativo y social que afecta directamente a 11 mil residentes. Adolfo Torres Ramírez, director del Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (OOAPAS), informó que la insuficiencia del recurso es crítica en la zona, lo que ha motivado la decisión institucional de extinguir la junta local de agua para que la paramunicipal absorba la operación y garantice un suministro eficiente.
El diagnóstico del organismo revela una situación de abandono operativo y financiero. Se han identificado ocho mil personas que reciben agua en cantidades insuficientes para cubrir sus necesidades básicas, mientras que otras tres mil personas residen en colonias que, a pesar de haber pagado los derechos de factibilidad del servicio hace años, nunca recibieron la conexión a la red. Según Torres Ramírez, la junta local ha operado en la opacidad durante la última década, sin rendir cuentas sobre sus finanzas ni sobre el destino de los cobros realizados a nuevos asentamientos.
Auditoría y respuesta ante las tomas de oficinas
La mañana de este jueves, las oficinas del OOAPAS y la Jefatura de Tenencia de Santa María fueron tomadas por un grupo de manifestantes que se oponen a la desaparición del órgano local. Los inconformes exigen que se preserve la junta, al menos para las nueve colonias fundadoras. No obstante, las autoridades municipales han señalado que estas movilizaciones podrían tener un trasfondo político-electoral, dado que la mayoría de los habitantes de la zona apoyan la integración al OOAPAS como la única vía real para solucionar el desabasto.