Cuanajo, localidad del municipio de Pátzcuaro, es considerada como la “cuna del mueble artesanal” y se ubica a 45 minutos de Morelia.

Cuanajo fue una población prehispánica ligada al señorío purépecha, pero con la llegada de los españoles, la comunidad se adoptó el oficio de la carpintería, es por eso que existen talentosos artesanos elaboran con maestría cada una de sus piezas, a tal grado que representan al sector mueblero en el país y su trabajo es reconocido en el mundo.

Tal es el caso de Joel Molina, un maestro carpintero, con varias generaciones de tradición, que elabora muebles principalmente de madera de pino, parota y cedro.

“Yo trabajo aquí con mi familia desde que yo me acuerdo, muy niño veía a mi familia elaborar los muebles, es algo con lo que he crecido y a lo que le tengo amor, por eso ahora me dedico a impulsar el legado”, comparte.

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En su mueblería, al igual que en cada calle de Cuanajo, se observan salas, comedores, recámaras, cantinas, roperos, cocinas, y piezas más pequeñas como bancos y elementos de decoración, talladas completamente a mano y con diseños muy michoacanos que por su belleza visten casas en todo México y países como Estados Unidos, Canadá, y algunos europeos como España.

“Tenemos clientes en toda la República Mexicana por nuestra calidad, muchas tiendas grandes vienen a comprar sus muebles a nuestro pueblo, además exportamos a varios lugares; en Texas es donde mayormente nos solicitan envíos”, explica.

Y así como Joel, que con 22 años de edad se ha involucrado en el negocio familiar, muchos jóvenes de la comunidad están imprimiendo el toque moderno y minimalista a los diseños, lo que ha representado un giro que alcanza mayor número de clientes, sin dejar de lado la tradición del estilo rústico.

Los muebles, admirados en todo el mundo, están en Michoacán, a precios accesibles, con calidad única y con diseños para todos los gustos.