En los últimos dos meses, la Fiscalía de Michoacán decomisó 354 máquinas tragamonedas en los municipios de Morelia y Zamora, la mayoría incautadas en la capital michoacana.
Los operativos de cateo y decomiso de máquinas tragamonedas se realizan con la participación de elementos de la Unidad Especializada de Combate al Secuestro (UECS), de la Coordinación Nacional Antisecuestros (Conse) y la Subsecretaría de Investigación Especializada (SIE), posterior a denuncias ante la fiscalía michoacana por la presencia de las máquinas en negocios comerciales.
En la Morelia se inspeccionaron establecimientos ubicados en colonias Solidaridad, Alfonso García, Ilustres Novohispanos, Ejidal Isaac Arriaga, Paseo de Las Lomas, Josefa Ocampo De Mata, Solidaridad, Ampliación Gertrudis Sánchez, Lázaro Cárdenas, Centro y Ocolusen.
En Zamora, las máquinas fueron incautadas en las colonias Centro, Ejidal Sur, El Valle, Arboledas, Ramírez, Altamira, Jardines de Catedral, todas ellas en zonas céntricas del municipio.
Los operativos se intensificaron debido a que, a decir del fiscal de Michoacán, Adrián López Sólis, las máquinas tragamonedas tienen una relación con bandas delincuenciales, que llegan y las imponen a los locatarios, en las tienditas, en las colonias, en las comunidades.
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Explicó que los delincuentes obligan a los comerciantes a mantenerlas en los establecimientos para generar un hábito en principio lúdico donde participan niños, niñas, adolescentes, incluso personas mayores.
Debido a su pequeño tamaño, las máquinas encajan en casi cualquier espacio, por lo que sin mediar palabra con los dueños de establecimientos, se instalan y más tarde se recogen las ganancias de cierta temporada, sin que los oferentes vean algún beneficio.
De los decomisos ya efectuados, López Solís especificó que la Fiscalía de Michoacán resguarda las máquinas, así como el efectivo en su interior, el cual ronda los 40 mil pesos por máquina.
De acuerdo con la Ley Federal de Juegos y Sorteos, las máquinas tragamonedas están prohibidas en el territorio nacional, debido a que “es una adicción que le abre las puertas a la delincuencia”.
La Secretaría de Gobernación reportó que, de manera semanal, las máquinas tragamonedas generan un ingreso nacional aproximado 600 millones de pesos.