La Agencia Internacional de la Energía (AIE) predice que la demanda global de combustibles fósiles alcanzará su punto máximo en 2030, a medida que las ventas de autos eléctricos y la economía china se centran en energías limpias.

Lo anterior contrasta con la visión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que espera un aumento posterior a 2030 en la demanda de petróleo y busca inversiones en el sector.

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Según el informe anual de la AIE, se pronostican picos en la demanda de petróleo, gas natural y carbón en la presente década, con el carbón disminuyendo significativamente después de 2030.

No obstante, la demanda de gas y petróleo se mantendrá cerca de su nivel máximo en las próximas dos décadas.

La AIE señala que, dado el estado actual, la demanda de combustibles fósiles aún excede los objetivos del Acuerdo de París de limitar el aumento de la temperatura global a 1.5 grados centígrados.