Denuncian desaparición forzada de joven en Morelia
evangelio | 7 abril, 2025

La madrugada del sábado 5 de abril, en pleno centro histórico de Morelia, ocurrió una desaparición que ha encendido nuevamente las alarmas sobre la seguridad y el estado de derecho en la capital michoacana. Durante un evento de música electrónica en ‘Casa de Sam’, tras un evento organizado por Greenhouse Mx, un joven fue golpeado y subido a la fuerza a un vehículo particular, sin intervención de autoridades y ante la mirada de varios testigos. El joven, identificado como Dyron Jaffit Herrera Hernández, de 29 años, no ha sido localizado desde entonces.

El hecho fue captado en video. En las imágenes, ampliamente difundidas en redes sociales, se observa cómo al menos cuatro personas sujetan a Dyron y lo sacan del establecimiento por la fuerza. Ocurre en una zona céntrica, bien iluminada, donde operan sistemas de videovigilancia y hay presencia policial relativamente constante. Y sin embargo, el crimen se llevó a cabo sin obstáculos. En cuestión de minutos, un joven desapareció en medio de una noche concurrida y no hubo reacción inmediata.

La familia de Dyron ha salido a dar declaraciones públicas, solicitando apoyo a las autoridades y desmintiendo versiones no oficiales sobre su estado. Señalan que Dyron padece una condición de salud mental, lo cual lo hace especialmente vulnerable, y han ofrecido una recompensa a quien proporcione información sobre su paradero.

Te puede interesar: Gobernación inicia diálogo con colectivos para actualizar registro de desaparecidos

La Fiscalía General del Estado de Michoacán emitió una ficha de búsqueda el mismo fin de semana y confirmó que abrió una carpeta de investigación. No obstante, hasta el momento no se han reportado detenciones, ni se han dado a conocer avances concretos en el caso. Tampoco se ha identificado públicamente a los agresores ni se ha informado si se han solicitado imágenes de cámaras de seguridad de la zona.

El caso ha causado inquietud entre colectivos y ciudadanos, no solo por la violencia del hecho, sino por el contexto. La desaparición de Dyron ocurrió en una de las zonas más transitadas de la ciudad, durante un evento público, en presencia de decenas de personas. Es decir, no fue un crimen en la sombra, sino un acto visible, documentado y, hasta ahora, impune.

Morelia atraviesa desde hace años una crisis persistente de desapariciones. Según cifras de la organización Red Lupa, hasta mayo de 2024 el municipio registraba al menos 640 personas desaparecidas, siendo el más afectado de Michoacán. Durante todo el año pasado, la Fiscalía recibió 868 denuncias por desaparición en la región, y aunque 686 personas fueron localizadas con vida, el número de personas no encontradas se mantiene en niveles preocupantes.

El caso de Dyron Jaffit Herrera Hernández vuelve a poner sobre la mesa la debilidad de las instituciones de seguridad, la lentitud en las respuestas oficiales y la necesidad urgente de fortalecer los mecanismos de prevención e investigación. La desaparición de una persona no puede seguir siendo una noticia de un solo día, ni un expediente más en un sistema colapsado.

La exigencia es clara: verdad, justicia y responsabilidad institucional. No solo por Dyron, sino por los cientos de desaparecidos que Morelia aún busca.

Comparte