Previo a la pandemia de Covid-19, en 2018, la Encuesta Nacional de Salud Mental y Adicciones reportó que aproximadamente el 17 % de los mexicanos presentaba al menos un trastorno de salud mental.
Después de tres años, durante el primer año de la pandemia, México fue el país que presentó el mayor aumento de casos de personas con ansiedad y depresión de entre todas las naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde).
La ansiedad presentó un aumento de 50% y la depresión incrementó en el 28 % de los ciudadanos.
El 50 % de los trastornos de ansiedad se presentan antes de los 25 años, en tanto que la mitad de los casos de depresión lo hacen entre los 20 y 30 años de edad.
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Para el caso de la esquizofrenia, en los hombres se presenta entre los 15 y 25 años, mientras que en las mujeres, entre los 25 y 35; y el trastorno bipolar y las adicciones se presentan entre los 20 y 30 años, en tanto que las enfermedades cognitivas, degenerativas y las demencias, son propias de los adultos mayores y suelen presentarse después de los 55 años de edad.
En promedio, el 81.4 % de las personas que sufren de algún tipo de padecimiento mental, no reciben la atención apropiada.
En ese sentido, los pacientes con trastorno de ansiedad son quienes presentan la mayor desatención, con el 85.9 de los casos, seguidos de la fobia social, con el 83.7 %, el abuso de alcohol, con 76.6 %; la depresión, con 73.9 %; el trastorno maniaco, con 73.6 %; y el trastorno por pánico, con 70.1 %.