La directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, Susan Monarez, fue despedida semanas después de su confirmación por el Senado. La Casa Blanca confirmó su salida tras un confuso anuncio que generó renuncias de altos funcionarios y acusaciones de politización en la salud pública.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos, liderado por Robert F. Kennedy Jr., informó que Monarez “ya no es directora”, mientras sus abogados aseguraron que no había dimitido ni sido despedida formalmente y atribuyeron el anuncio a represalias políticas por negarse a firmar directivas “no científicas e imprudentes”.
El despido se produce en paralelo a cambios en la política de vacunación contra Covid-19 en EUA, con nuevas dosis limitadas a población de alto riesgo y el retiro de autorizaciones de emergencia previas, en un giro alineado con la postura escéptica de Kennedy hacia las vacunas. En junio, el secretario despidió también a los 17 miembros del comité asesor del CDC sobre vacunación infantil, acción criticada por expertos en salud.
Susan Monarez había sido la primera directora confirmada por el Senado tras la nominación de Donald Trump, y su liderazgo fue clave durante la pandemia. Los CDC continúan siendo un organismo estratégico en la prevención de enfermedades crónicas, brotes infecciosos y emisión de recomendaciones sanitarias de alto impacto.