El expresidente estadounidense Donald Trump sacó de sus casillas al juez Arthur Engoron durante su juicio en el tribunal de justicia del sur de Manhattan.

Trump llegó al tribunal desafiante, acusando a la fiscal general de Nueva York, Letitia James, y a “todos los demócratas” de llevar a cabo una persecución en su contra, calificándolos como sus “haters”.

El juez Engoron expresó su frustración ante las respuestas extensas de Trump a preguntas que requerían respuestas simples: “Por favor, solo responda las preguntas, sin discursos”, pidió el juez antes de solicitar a los abogados de Trump que controlaran a su cliente.

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En días previos a la comparecencia, Trump utilizó su red social Truth Social para criticar al juez Engoron, calificándolo de “loco, totalmente desquiciado y peligroso”.

El juez ya ha impuesto multas a Trump por violar una orden de silencio al atacar a la secretaria judicial en redes sociales.

Antes del juicio, el juez Engoron dictaminó que la fiscalía presentó pruebas concluyentes de que Trump exageró su patrimonio neto en documentos financieros.

Trump enfrenta otras cuatro causas legales, pero hasta el momento no han afectado su popularidad en las encuestas, en tanto que sus abogados han rechazado las acusaciones de fraude, argumentando que las valoraciones inmobiliarias son subjetivas y que los bancos no han sufrido pérdidas.