“Dicen que un gaspachero está ahí en el tendedero”, le cuenta un vendedor de gaspachos a otro mientras curiosean con la mirada para tratar de dar con el rostro del acusado de deudor en las imágenes que se exhiben en la Cerrada de San Agustín de Morelia.
Otro grupo de jóvenes que transitan por el lugar bromean con lo que tienen ante sus ojos. “¡Aguas, güey! De seguro has de andar por ahí”, expresa un integrante del grupo y todos se carcajean al mismo tiempo.
Sin embargo, la cosa es seria. En el llamado “Feliz Día del Padre Ausente”, el colectivo Deudores Alimentarios Michoacán ha instalado un tendedero para dar a conocer a aquellos progenitores que no se hacen cargo económicamente de sus hijos.
A lo largo de la acera hay impresos 500 rostros, pero en realidad, lo que faltó fue material, pues las representantes de la organización informaron que, con base a su registro de datos, son 700 denuncias las que actualmente se encuentran vigentes en contra de todo deudor alimentario.
En el listado hay hombres de Morelia, pero también de muchos de los municipios de Michoacán. Algunos aparecen señalados como padres que abandonaron a un hijo, pero están otros que son identificados con hasta tres casos de incumplimiento.
Las denuncias se presentan como una cifra mínima si se toma en cuenta que, de acuerdo al último censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) de 2022, en el estado se contabilizan 402 mil madres autónomas.
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¿Los motivos? Las activistas consideran que va desde el miedo, la falta de recurso para iniciar un proceso legal, el temor a los prejuicios y hasta la normalización de la cultura de abandono, en la que la mujer es presentada siempre como la culpable.
Pero también hay datos que pueden desalentar el ejercicio de este derecho, pues de las 700 denuncias, señalan que solamente se han ganado 11 sentencias que van desde retroactivos, reconocimiento de paternidad y custodias.
A esto se le suman otros pendientes en materia legislativa, como es el caso del Registro Nacional de Obligaciones Alimentarias (Renoa), pues pese a que su creación fue aprobada por el Senado de la República en marzo del año pasado para concentrar la información de todo deudor, en Michoacán no se ha homologado la ley.
“Hay hombres que de plano no tienen remedio porque no cuentan con atención psicológica, y se entiende de alguna manera que ellos también traen su carga con el machismo y las violencias que de ahí emanan”, expresa una de las integrantes del colectivo.
Ante el cuestionamiento de cómo provocar valentía en las mujeres que todavía no se han atrevido a levantar la voz, la activista reflexiona y lo resume con una frase: “Decirles que el camino somos nosotras mismas”.