La 51ª Cumbre del Grupo de los Siete (G7) inició en Kananaskis, una de las reservas naturales más emblemáticas de Canadá.

Líderes de las principales economías del mundo discutirán durante tres días temas clave como la economía global, la guerra en Ucrania y el cambio climático.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, asiste como invitada especial y sostendrá el martes por la tarde su primera reunión bilateral con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

En su agenda figura una propuesta para que los países más ricos sustituyan el gasto en armamento nuclear por inversiones en desarrollo social, como vía para reducir los flujos migratorios.

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El encuentro se lleva a cabo en el albergue Pomeroy Kananaskis Mountain Lodge, bajo un fuerte operativo encabezado por la Real Policía Montada de Canadá, en coordinación con cuerpos de seguridad provinciales y las Fuerzas Armadas.

Cinco filtros de acceso resguardan los caminos hacia la sede. Solo quienes cuenten con acreditación especial pueden ingresar, mientras que la prensa ha sido concentrada en el Centro de Medios en Banff, a 40 kilómetros.

La cumbre se desarrolla en un entorno privilegiado, con vistas al valle de Kananaskis y espacios de lujo que contrastan con la tensión global que rodea los temas en discusión.

La propuesta de Sheinbaum ha sido bien recibida por algunos sectores diplomáticos, aunque aún no se anticipan reacciones oficiales del bloque.