Apenas en marzo, la compañía de vehículos eléctricos propiedad de Elon Musk, Tesla, anunció que construiría una planta en Nuevo León, en una operación para la que los funcionarios mexicanos han asegurado que se trataría de una inversión de cinco mil millones de pesos.

Sin embargo, Elon Musk acaba de expresar su preocupación sobre la expansión de la empresa, aludiendo al temor sobre el aumento de las tasas de interés que podría encarecer los precios de los autos.

Te puede interesar: Gobierno de Nuevo León rechaza rumores de salida de inversión de Tesla

Musk recuerda el gran quiebre de las automotrices la primera década del siglo: “Estoy marcado por el año 2009, cuando General Motors y Chrysler quebraron. No quiero ir a toda velocidad hacia la incertidumbre”.

En el lado de México, las autoridades de Nuevo León han asegurado que el propio Elon Musk tiene el deseo de apresurar la puesta en marcha de proyecto y que a finales de este año o principios de 2024 podría iniciarse la construcción, para comenzar a producir vehículos en 2026.

Incluso, horas antes de las recientes declaraciones del magnate, el gobernador Samuel García anunció que dos proveedores de Tesla iniciarán su instalación en la entidad.