El presidente Andrés Manuel López Obrador puso el dedo de la inseguridad y la violencia en Guanajuato en la figura del fiscal Carlos Zamarripa, quien tiene en el cargo desde 2009 y le fue renovado hasta 2028.

“Nosotros siempre hemos sostenido que lo de Guanajuato es muy extraño porque hay bastante violencia, muchos homicidios”, dijo el mandatario en conferencia de prensa matutina.

El mandatario mostró una gráfica con los homicidios acumulados del 27 al 31 de marzo, en el que destaca Guanajuato con 40 casos, seguido de Estado de México (34), Michoacán (29), Chihuahua (26), Chiapas (24) y Morelos (23).

Si bien esos estados concentran el 53 % de los homicidios en México, el 12 % de ellos se perpetran en Guanajuato.

“Muy respetuosamente, en su momento –porque lo considero una gente buena, no lo considero una gente perversa–, al gobernador de Guanajuato (Diego Sinhue Rodríguez Vallejo) le dije que les iba a ayudar [en el tema de seguridad] que cambiaran al fiscal, que ya llevaba 13 años”, comentó el mandatario.

López Obrador dijo que luego de la sugerencia, la cual, subrayó, “fue en corto” (en persona), durante un encuentro en la entidad.

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“Yo te recomendaría que pienses en quitar al fiscal, sencillamente porque no hay resultados”, le expresó al gobernador de extracción panista.

Las declaraciones del presidente se dan en el contexto del asesinato de la candidata de Morena a la alcaldía de Celaya, Gisela Gaytán, la tarde del lunes.

“No sólo no me hizo caso, no tomó en cuenta mi consejo de buena fe, sino que al día siguiente el consejero jurídico de la Presidencia me dijo que le había hablado el fiscal [Zamarripa] para decirle que ya sabía que yo había pedido que lo cambiara… ¿Quién le dijo? ¡Pues el gobernador!”, lamentó.

El presidente sostiene que la permanencia del fiscal y la relación “muy rara, como un contubernio”, con un grupo poderoso en la región, “que tiene más poder que el propio gobernador”, ha sido un lastre para Guanajuato.

“Como que el gobernador gobierna, pero no manda, para decirlo claro… lamentable, y es una buena persona”, aseveró el presidente mexicano.

Guanajuato es gobernado por el PAN desde hace más de 30 años; Celaya es gobernado por ese partido desde 1998, antes estuvo sólo el PRI.

El fiscal de Guanajuato, Carlos Zamarripa, ha sido criticado por la inseguridad que se vive en el estado, ya que ocupa ese cargo desde 2009 y se le amplió para que lo ocupe hasta 2027.

Guanajuato es el estado más violento de México desde hace más de cinco años.