Hoy, en un ambiente cargado de tensiones entre la militancia del PRI, se llevará a cabo la 24ª Asamblea Nacional, la cual será encabezada por el presidente del partido, Alejandro Moreno Cárdenas, quien está en el ojo del huracán por impulsar reformas estatutarias que le permitirían reelegirse hasta 2030.

Los trabajos de la asamblea, que se desarrollarán a puerta cerrada y sin acceso a medios de comunicación, estarán a cargo de una mesa directiva liderada por Moreno Cárdenas, la secretaria General, Carolina Viggiano, y el secretario Técnico del Consejo Político Nacional, Pablo Angulo, junto con 14 vicepresidentes y cinco escrutadores designados por el presidente del partido para proponérselos a los asambleístas.

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Además de que los delegados fueron seleccionados bajo la supervisión de “Alito” en todos los estados, fue hasta tres días antes del inicio de la asamblea que se les informó del lugar de celebración, decidiendo no utilizar las instalaciones del PRI.

De acuerdo con Manlio Fabio Beltrones, los delegados llegados de todo el país aún desconocen las ubicaciones de las mesas de trabajo, sumando a que la rapidez con la que se ha llevado a cabo ese proceso ha despertado sospechas, ya que Moreno inició los preparativos para modificar los estatutos un día después de las elecciones del 3 de junio.

En tan solo un mes, se ha logrado la convocatoria del Consejo Nacional, la emisión de la convocatoria y la realización de las 32 asambleas estatales, lo cual, según Beltrones, pareciera haber sido llevado a cabo de manera sigilosa, pues muchos priístas no tenían conocimiento de ello.

Desde junio de 2022, varios expresidentes del PRI solicitaron la renuncia de “Alito” debido a los malos resultados en la elección intermedia.