Este 1 de mayo, Día del Trabajo, entró en vigor el Fondo de Pensiones para el Bienestar, y estas son las claves que debes conocer para entenderlo.

El Fondo de Pensiones para el Bienestar es un fideicomiso público que brindará a los institutos de seguridad social (IMSS, Infonavit e ISSSTE) los recursos necesarios para complementar las pensiones de los trabajadores y procurar que estas sean iguales a su último salario, siempre y cuando no se rebase un tope de 16 mil 777.78 pesos al mes.

Solo elegirán para recibir dicho complemento los trabajadores que se retiren a la edad de 65 años, que coticen en el sistema Afore (es decir, desde julio de 1997 en el caso del IMSS y desde abril de 2007 en el caso del ISSSTE), y cuya pensión no rebase el tope anteriormente mencionado.

Las modificaciones a la reforma establecen que el dinero de las personas mayores de 70 años que cotizaron en el IMSS y que está en cuentas inactivas, se van al Fondo de Pensiones para el Bienestar, que administrara el Banco de México.

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Aun cuando tus ahorros se transfieran al Fondo de Pensiones para el Bienestar, la ley seguirá garantizando la imprescriptibilidad de tu derecho y el de tus beneficiarios a reclamar esos recursos.

De acuerdo con la publicación en el Diario Oficial de la Federación, se señala que se tiene que crear un Comité Técnico responsable de determinar cómo se invertirá el dinero del Fondo de Pensiones.

También tiene la labor de emitir las reglas para saber cómo se reciben los recursos, cómo se administran y cómo serán los rendimientos.

El gobierno federal y los legisladores de Morena justifican la necesidad de crear el Fondo porque, dicen, gracias a las reformas de 1997 y 2007, que crearon y consolidaron el sistema de cuentas individuales en las Afores, las pensiones que reciben actualmente los trabajadores son muy bajas.