De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Salud Financiera (Ensafi) del Inegi, en México poco más de la mitad de los adultos (52 %) posee algún tipo de ahorro, ya sea en instituciones financieras o informales como cajas de ahorro, tandas o simplemente en efectivo en casa.

Los hombres y los adultos jóvenes sobresalen como los grupos con mayor propensión al ahorro, según las cifras recopiladas.

A nivel nacional, se destaca que más del 50 % de los mexicanos que ahorran tienen reservado el equivalente a, como máximo, una quincena de sus ingresos laborales.

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Sin embargo, el panorama de prevención financiera para emergencias muestra una situación menos alentadora: únicamente uno de cada 10 adultos cuenta con un ahorro que supere los tres meses de sus ganancias habituales.

Contrastando con el ahorro, la deuda también juega un papel significativo en la economía de los mexicanos, siendo el 36.2 % quienes admiten tener algún tipo de deuda, formal o informal, la mayoría de las veces en cantidades moderadas.

Por otro lado, tan solo el 7.7 % de los adultos mexicanos mayores de 18 años tienen la seguridad de que les sobra dinero al final de cada mes, después de cubrir todos los gastos necesarios. En un extremo opuesto, la mayoría de los ciudadanos (45.9 %) sienten que casi nunca o nunca les queda dinero adicional.