Escuelas que enseñan, pero no titulan: el vacío legal de la educación privada en Michoacán
evangelio | 30 junio, 2025

En México, la educación privada se ha expandido como alternativa ante la saturación del sistema público. Sin embargo, en ese crecimiento también se han colado instituciones que operan sin los mínimos legales que exige el Estado. Universidades particulares que imparten clases, cobran colegiaturas y entregan diplomas, pero no cuentan con el Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios (RVOE). El resultado es brutal: miles de estudiantes egresan con títulos que no tienen valor legal, sin posibilidad de ejercer, registrar una cédula profesional o continuar estudios superiores.

En Michoacán, el problema es especialmente agudo. A lo largo del estado, numerosos planteles ofrecen carreras sin contar con un RVOE vigente. Este documento, emitido por la Secretaría de Educación Pública, es el único que avala oficialmente un programa educativo. Sin él, los estudios cursados quedan en el limbo.

Tan solo el pasado junio, el Instituto de Educación Media Superior y Superior del Estado (IEMSySEM) informó que al menos 56 instituciones particulares estaban operando en Michoacán sin RVOE válido o utilizando registros emitidos por otras entidades, lo cual carece de validez legal dentro del estado. La revisión abarcó escuelas de municipios como Morelia, Zamora, Uruapan, Apatzingán y Zitácuaro.

Además, varias instituciones han sido clausuradas por ofrecer carreras sin sustento legal. Entre ellas se encuentran el Instituto de Profesionalización y Desarrollo Humano de Apatzingán, la Escuela de Negocios Internacionales de Zamora y el Instituto Educativo de la Meseta en Uruapan. En cada uno de estos casos, las autoridades educativas determinaron que los planteles operaban sin el reconocimiento oficial requerido.

Te puede interesar: Graduados en fuga: cuando estudiar ya no alcanza en Michoacán

El patrón se repite: algunas escuelas aseguran tener el “RVOE en trámite”, otras se respaldan en convenios ambiguos con instituciones del extranjero y muchas simplemente omiten toda referencia al requisito. La falta de supervisión sistemática por parte de las autoridades educativas durante varios años permitió que estos esquemas se consolidaran. Aunque en 2023 se reactivaron las inspecciones presenciales en diversos municipios, el problema sigue presente y no existe una lista pública, oficial y actualizada que permita identificar con claridad los planteles irregulares.

Reconocimientos de validez oficial de estudios del tipo superior

Ante este escenario, la única herramienta efectiva para prevenir fraudes educativos es la verificación directa. El portal oficial SIRVOES, operado por la SEP, permite consultar si una escuela y su programa académico cuentan con RVOE vigente. Las autoridades recomiendan confirmar que el nombre de la institución, el domicilio y el programa coincidan exactamente con lo que se ofrece. También se puede solicitar una copia del RVOE en la propia escuela, y reportar cualquier irregularidad a Profeco o a la Comisión Estatal de Derechos Humanos.

La educación sin validez legal no solo afecta el bolsillo. Cierra caminos. Cancela futuros. En Michoacán, donde muchas familias hacen esfuerzos extraordinarios para costear una carrera universitaria, estudiar en una institución sin RVOE no es solo un riesgo: es una condena silenciosa. Porque hay escuelas que enseñan, sí, pero cuyos títulos no valen ni para abrir la puerta del primer empleo.

Lo verdaderamente grave no es que alguien elija estudiar en una escuela sin validez oficial, siempre que lo haga con conocimiento de causa. Lo inadmisible es que lo haga sin saberlo, engañado por instituciones que operan al margen y por autoridades que no vigilan. En ese vacío de información, el daño es doble: se pierde el dinero y también la oportunidad.

Comparte