Un grupo de científicos realizó un descubrimiento alarmante sobre los microplásticos, revelando que esas diminutas partículas de plástico, de menos de cinco milímetros, acumulan obstrucciones en los vasos sanguíneos del cerebro de ratones, afectando su movimiento.
Dicho fenómeno, documentado en tiempo real por medio de un estudio publicado en “Science Advances”, plantea dudas sobre las posibles consecuencias para la salud humana.
Los investigadores utilizaron una innovadora técnica de microscopía de dos fotones, que permitió observar cómo los microplásticos fluorescentes se desplacen por el cuerpo de los ratones.
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Tras administrar agua contaminada con esas partículas, se encontraron células inmunitarias que habían ingerido plásticos atrapadas en los vasos sanguíneos del córtex cerebral.
El autor principal del estudio, Haipeng Huang, describió las obstrucciones como un “accidente de tráfico” en el sistema circulatorio.
Aunque algunas obstrucciones se resolvieron con el tiempo, otros bloqueos persistieron durante las cuatro semanas del estudio.
Los investigadores notaron un impacto en el flujo sanguíneo y la movilidad de los ratones, sugiriendo similitudes con coágulos de sangre.
Los hallazgos son preocupantes teniendo en cuenta estudios previos que han hallado microplásticos en tejidos cerebrales humanos, lo que eleva las inquietudes sobre su potencial impacto en la salud.