El gobierno de Estados Unidos está listo para comenzar de inmediato la construcción de nuevos tramos del muro fronterizo en el sur de California después de que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) emitiera una exención de las regulaciones ambientales el martes.
La exención, firmada por la secretaria Kristi Noem, exime al proyecto de docenas de leyes, incluida la Ley Nacional de Política Ambiental, lo que permite que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) acelere la construcción de aproximadamente 4 kilómetros (2.5 millas) del muro cerca de San Diego y Jacumba Hot Springs.
El DHS afirmó que la exención “eliminará retrasos burocráticos” y reforzará la seguridad nacional
“Esta exención despeja el camino para el despliegue rápido de barreras físicas donde más se necesitan, reforzando nuestro compromiso con la seguridad nacional y el Estado de derecho”, declaró el departamento en un comunicado.
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Grupos ambientalistas como Earthjustice criticaron la decisión, argumentando que prescindir de las leyes ambientales podría dañar las comunidades y los ecosistemas fronterizos
“Prescindir de las leyes medioambientales, de preservación cultural y de buen manejo… sólo causará más daño a las comunidades y ecosistemas fronterizos”, dijo Cameron Walkup de Earthjustice.
La construcción del muro fronterizo es una prioridad para el gobierno de Trump
El subjefe de la Patrulla Fronteriza, David BeMiller, dijo que se han construido más de 81 kilómetros (50 millas) de muro desde que Trump asumió el cargo
El gobierno apunta a completar unos 2 mil 250 kilómetros (1.400 millas) de barrera fronteriza continua
Según BeMiller, los agentes de la Patrulla Fronteriza detienen a unas 220 personas al día por cruzar ilegalmente la frontera desde México.