La Secretaría de Agricultura de Estados Unidos anunció la reapertura gradual de su frontera sur para el ingreso de ganado proveniente de México, como parte de un acuerdo bilateral frente a la plaga del gusano barrenador. La medida entrará en vigor a partir del 7 de julio, iniciando con el puerto fronterizo de Douglas, Arizona.
La decisión se basa en los avances realizados en coordinación con autoridades mexicanas, entre ellos la dispersión de más de 100 millones de moscas estériles en territorio nacional. Esta técnica busca controlar biológicamente la propagación del gusano barrenador, una plaga que amenaza al sector ganadero.
“Hemos hecho buenos progresos con nuestros homólogos en México para aumentar los esfuerzos vitales de vigilancia de plagas”, señaló la Secretaría de Agricultura estadounidense, que también reconoció el fortalecimiento de las medidas sanitarias y de control fronterizo.
Con esta reapertura, se espera reactivar el comercio ganadero entre ambos países, afectado por las restricciones impuestas desde el brote. Las autoridades de ambos lados de la frontera continuarán monitoreando la situación sanitaria para evitar nuevos cierres y proteger la salud animal en la región.