Este martes se registraron al menos tres explosiones en Cali dirigidas contra puestos policiales en los barrios Meléndez, Manuela Beltrán y Marroquín, dejando una persona fallecida y varios heridos, entre ellos un cuidador de motos, según reportes oficiales.
Las autoridades activaron protocolos de emergencia y atendieron los artefactos con presencia de policía y personal de salud en los sitios afectados.
El alcalde Alejandro Eder confirmó en su cuenta de X que uno de los explosivos había sido colocado en una motocicleta en Meléndez y otro en el CAI de Manuela Beltrán. Además, se reportó un tercer artefacto en Los Mangos, prolongando el toque de alerta en toda la ciudad.
La situación ocurre en un contexto de escalada delictiva en el suroccidente colombiano, donde en las últimas horas también se registraron atentados en municipios cercanos como Jamundí, Buenaventura y varias acciones con explosivos y enfrentamientos con grupos disidentes en el Cauca.
El gobierno local mantiene reforzada la seguridad y activó alertas para disuadir posibles nuevos ataques.
Las investigaciones se centran en identificar a los responsables y prevenir nuevos atentados, mientras Eder llamó a la calma y solicitó apoyo a la fuerza pública y al Gobierno Nacional para reforzar la capacidad operativa en la región.
Las medidas incluyen operativos antiexplosivos, controles de vigilancia estratificados y coordinación con autoridades nacionales.