En una propuesta que ha generado tanto sorpresa como escepticismo, el director del FBI, Kash Patel, está evaluando la posibilidad de contratar entrenadores de la Ultimate Fighting Championship (UFC) para mejorar las habilidades de autodefensa de los agentes de la Oficina, según informaron fuentes internas.

Durante su primera llamada con los 55 supervisores de las oficinas de campo del FBI, Patel discutió la idea, inspirada por Dan Bongino, un podcaster de extrema derecha y amigo cercano del presidente Donald Trump, quien es un apasionado de la UFC.

Aunque la propuesta ha sido calificada como “descabellada” por algunos agentes, Patel considera que el fortalecimiento del entrenamiento físico es una prioridad.

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La organización no ha emitido comentarios oficiales, y un portavoz de UFC también se mantuvo en silencio al respecto.

Un exfuncionario del Departamento de Justicia criticó la propuesta, sugiriendo que Patel se deja llevar por la “espectacularidad” y que no es el enfoque adecuado para el FBI.

Desde su llegada al cargo, Patel ha implementado cambios que incluyen la reubicación de mil 500 empleados del FBI fuera de Washington, D.C., buscando establecer una relación más cercana con las comunidades del país.

Sin embargo, la viabilidad de una asociación entre el FBI y la UFC sigue siendo incierta, y los detalles sobre cómo se implementaría el entrenamiento aún no han sido esclarecidos.