El fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, anunció que antes de atraer el caso de los crematorios clandestinos hallados en Teuchitlán, Jalisco, se llevará a cabo una investigación para esclarecer si las autoridades locales tenían conocimiento de estos hechos.

Según el funcionario, resulta inverosímil que un caso de esta magnitud pasara desapercibido para el gobierno municipal y estatal.

Durante la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, Gertz Manero explicó que la Fiscalía General de la República (FGR) no tomará el caso de inmediato, sino que primero analizará su historial y las posibles omisiones de las autoridades locales.

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Insistió en que se indagará a fondo cómo fue posible que este hallazgo se realizara a través de un colectivo ciudadano y no mediante una investigación oficial.

El descubrimiento de estos crematorios clandestinos ocurrió en el rancho Izaguirre, donde activistas encontraron más de 200 pares de zapatos y diversas prendas de vestir.

Estos indicios han reforzado la sospecha de que el lugar fue utilizado para la desaparición de personas, lo que ha generado indignación y preocupación entre la sociedad civil y organizaciones de derechos humanos.

El caso ha puesto en el centro del debate la respuesta de las autoridades estatales ante la crisis de desapariciones en Jalisco. La FGR buscará esclarecer si existió encubrimiento o negligencia, mientras colectivos exigen justicia y medidas efectivas para frenar la violencia en la región.