La Fiscalía de Estados Unidos entregó a la defensa del narcotraficante Rafael Caro Quintero un conjunto de evidencias que refuerzan la acusación en su contra por el asesinato del agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena.

Entre los elementos figuran grabaciones de audio del interrogatorio y tortura al agente, así como archivos clasificados bajo orden de confidencialidad.

El fiscal Joseph Nocella envió los materiales a los abogados de Caro Quintero bajo el amparo de la Regla 16 del Procedimiento Penal Federal.

En el expediente también se incluyen documentos y fotografías de homicidios ocurridos en 1981 y 1985, armas de fuego utilizadas en los crímenes y conversaciones grabadas que vinculan al capo con actividades delictivas.

La fiscal Saritha Komatireddy confirmó que el gobierno de EUA aún considera la posibilidad de solicitar la pena de muerte, decisión que podría definirse en la próxima audiencia del caso, programada para el 18 de septiembre en una corte federal de Nueva York.

Durante esa audiencia, el juez Frederick Block determinará si se avanza hacia un juicio o se explora un acuerdo legal.

Caro Quintero enfrenta cargos por encabezar una organización criminal, conspiración para asesinato, distribución internacional de narcóticos y uso de armas de fuego con fines de narcotráfico.

Su extradición a Estados Unidos ocurrió en febrero pasado, junto a otros 29 líderes de cárteles mexicanos. La fiscalía advirtió que las grabaciones sobre el caso Camarena serán utilizadas como “pruebas sensibles” en su contra.