El huracán Milton causó estragos en el centro de Florida en la noche del miércoles, dejando un rastro de destrucción que se extiende de este a oeste.

La tormenta, que llegó solo dos semanas después del devastador paso de otro ciclón, generó fuertes inundaciones y tornados mortales en diversas localidades del estado.

El gobierno federal ha confirmado al menos 10 muertes atribuidas al meteoro, con el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, indicando que las víctimas “fueron causadas por los tornados” generados por Milton.

A medida que la tormenta avanzó, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos reportó que Milton se había convertido en una baja extratropical con fuerza de huracán.

A pesar de que Milton dejó atrás Florida por la mañana y ahora se encuentra en aguas del Atlántico, las condiciones de tormenta tropical y marejada ciclónica persisten en partes de la costa sureste de Estados Unidos

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Los servicios meteorológicos habían anticipado el riesgo de tornados asociados con el huracán, lo que se corroboró a medida que avanzaba la tormenta.

Las inundaciones afectaron lugares como Daytona Beach y Saint Augustine, así como también el corazón de Florida, donde ciudades como Orlando sufrieron severas consecuencias.

A pesar de la devastación, el gobernador DeSantis señaló que “la inmersión marina no fue tan significativa como durante el huracán Helene hace unas semanas”, sugiriendo que Milton había disminuido en intensidad y cambiado ligeramente de rumbo antes de hacer su entrada.

En una demostración de unidad estatal, el gobernador Ron DeSantis dialogó con el presidente Joe Biden sobre la situación, resaltando que Milton tenía el potencial de ser uno de los huracanes más destructivos en el último siglo.

Por su parte, el expresidente Donald Trump, residente en Florida, lamentó las secuelas de Milton en un video compartido, expresando sus oraciones por los afectados junto a su esposa Melania.