Ante los altos niveles de deforestación, cambio ilegal de uso de suelo y expansión aguacatera, autoridades ambientales clausuraron ocho ollas de agua en el Cerro del Águila, al sur-poniente de Morelia.

La zona recientemente fue declarada como Área Natural Protegida por el gobierno del estado, así como sitio de restauración por el intenso estrés al cual lo ha sometido la agroindustria del aguacate y otros monocultivos.

La Procuraduría Ambiental de Michoacán (Proam) informó sobre el operativo en el cual participaron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Civil, Guardia Nacional y otras corporaciones locales de protección al medio ambiente.

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Las ollas eran utilizadas para el riego de cultivos como aguacate, predios que también fueron asegurados por el personal de seguridad pública con la colocación de sellos de clausura.

El titular de la Proam, Arturo Chávez Carmona, manifestó la importancia de ese tipo de operativos, que además del impacto directo, desincentivan futuros intentos de instalar ollas de agua y remover la capa forestal para instalar cualquier tipo de desarrollo agrícola.

“Es necesario desincentivar la creación de ese tipo de infraestructuras, utilizadas para el riego de cultivos, que al acaparar grandes volúmenes hídricos disminuyen la cantidad de agua que baja a los mantos freáticos, lo cual ya ha traído problemas”, explicó el titular de la Proam.