El Real Apodaca, de la Liga Premier Mx, separó de manera indefinida a diez de sus futbolistas por encontrarlos sospechosos en temas relacionados con apuestas.

A través de un comunicado, el club de Nuevo León no reveló los nombres de los acusados, pero detalló que serán sometidos a investigación con base en lo que establece la Federación Mexicana de Futbol (FMF).

“Real Apodaca informa que tras una exhaustiva revisión interna y en alineación con nuestros valores fundamentales de integridad, respeto y transparencia, hemos tomado la decisión de separar del plantel a un grupo de jugadores, mientras se llevan a cabo las investigaciones correspondientes, por parte de las autoridades”, expresa el boletín de prensa.

Y es que en el último encuentro, se identificó que algunas acciones de los futbolistas del equipo profesional eran sospechosas, lo que derivó en una derrota para el conjunto norteño.

Te puede interesar: El 90 % de los mexicanos que juegan en Liga Mx se formaron en Liga Premier

“Esta medida se adoptó al identificar conductas que contravienen los principios de profesionalismo y ética que sustentan nuestra institución. En Real Apodaca FC, creemos en la construcción de un equipo basado en el esfuerzo, la disciplina, el respeto a la institución y al juego limpio, no podemos permitir acciones que comprometan la credibilidad, el prestigio y el trabajo de nuestra organización”, remarcaron.

Otros casos

No es la primera vez que en el futbol mexicano estalla un escándalo relacionado con las apuestas, pues apenas el año pasado la FMF dio a conocer que investigarán a jugadores del Alebrijes de Oaxaca de la Liga de Expansión por la misma situación.

Sin embargo, pese a que ya han pasado varios meses, hasta el momento la federación no ha podido comprobar las sospechas y no se ha emitido una resolución sobre este caso.

Hace dos jornadas, el defensa del Atlético Morelia, Juan Carlos Sancho, cometió dos autogoles vergonzosos en el juego ante los Alteños del Tepatitlán, por lo que periodistas deportivas señalaron que su actitud en el campo fue rara, atípica y digna de investigación.

No obstante, al cuestionarle al presidente de los Canarios, José Luis Higuera, si accedería a que se revisara el caso, expuso que no era necesario, dado que consideró que solamente se trató de un accidente futbolístico y no de una acción con dolo en contra del equipo.