Según información que publica el diario El Universal, desde su celda en Estados Unidos, Genaro García Luna, extitular de la Secretaría de Seguridad Pública durante el gobierno de Felipe Calderón, realizó fuertes acusaciones en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador.

En una carta dirigida al periodista Keegan Hamilton, García Luna sostiene que “existen audios, videos y registros de comunicación” que vinculan a López Obrador y a su equipo con narcotraficantes, aunque no aclara si las evidencias están en poder de alguna agencia estadounidense.

En su misiva, compuesta por cuatro páginas y escrita a mano, el exfuncionario menciona que “es del conocimiento público y está en los registros oficiales de México y EU, los contactos, videos, audios, fotografías, registros de comunicación y gestión entre el actual presidente de México, Andrés López Obrador y sus operadores con los líderes del narcotráfico y sus familias”.

De acuerdo con El Universal, García Luna señala específicamente que esos vínculos involucran a narcotraficantes que sirvieron como testigos en su juicio, quienes, según él, “imputan al presidente López Obrador y sus operadores de estar vinculados con ellos y el narcotráfico”.

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Durante la carta, García Luna también reveló que la Fiscalía de Nueva York le ofreció un trato para inculparse en delitos de narcotráfico a cambio de solo seis meses de detención, con la promesa de beneficios económicos y protección como testigo.

Según sus palabras, la captura de Ismael “El Mayo” Zambada respalda sus acusaciones, señalando que la situación evidencia “el desmantelamiento del Poder Judicial de México, cuyos principales beneficiarios son los criminales”.

El Universal señala que el exfuncionario defendió su inocencia, alegando que ha pasado casi un año en celdas de castigo, durante el cual sus compañeros de prisión lo han grabado “por dos mil horas tratando de involucrarme con el narcotráfico”.

García Luna concluyó su exposición afirmando que durante su juicio en febrero de 2023, “la parte acusadora no presentó una sola prueba o existencia que acreditara los delitos que señalaron”.

En su defensa, insistió que no se mostraron documentos, fotografías, videos, audios ni registros que vincularan a su persona con el narcotráfico o sus familias.