Ante posibles afectaciones económicas al sector turístico, el gobierno de Michoacán solicitará a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) una revisión de los análisis que clasifican a seis playas del estado como no aptas para uso recreativo.
El Ejecutivo estatal coincidió con la postura de las comunidades y prestadores de servicios turísticos, quienes afirman que en la zona no hay descargas de aguas residuales ni desarrollos hoteleros que pudieran contaminar el mar.
En paralelo, la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios iniciará estudios independientes, con análisis de muestras de agua en laboratorios locales, con el fin de contrastar los resultados de la autoridad federal.

Para esta temporada vacacional, la costa michoacana espera más de medio millón de visitantes, lo que representa casi una tercera parte del flujo turístico de verano.
Las playas señaladas por Cofepris como contaminadas por bacterias fecales incluyen Caleta de Campos, Nexpa, Playa Azul y Chuquihuitillo, entre otras.