Gobiernos del PAN cancelaron y autoridades los libros de texto de la Secretaría de Educación Pública (SEP) en varios estados de México.

Los materiales didácticos fueron criticados por Partido Acción Nacional, cuyo líder nacional, Marko Cortés, propuso destruirlos.

Autoridades educativas se sumaron al rechazo de los gobiernos panistas y también se pronunciaron contra los libros.

La gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos, ordenó detener la distribución de nuevos libres de texto en su estado, así como el gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo.

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Guanajuato embodegó los nuevos libros en acato a la suspensión definitiva concedida a la Unión de Padres de Familia por una jueza federal.

La Secretaría de Educación de Guanajuato informó que había recibido el 35.9 % de los nuevos libros de texto, los cuales fueron distribuidos en algunas escuelas; sin embargo, la semana pasada personal de las escuelas los regresó a las bodegas por órdenes de esa dependencia estatal.

En Jalisco hay más de un millón de libros de texto embodegados, debido a un amparo que impide que se distribuyan.

Por su parte, gobernadores de Morena salieron en defensa de la distribución de libros y criticaron el llamado del PAN a destruirlos.